Alemania redoblará y endurecerá sus restricciones a la vida pública y a la actividad económica entre el 1 y el 6 de abril, alargando los festivos de Semana Santa, para tratar de frenar la tercera ola de la pandemia.
La canciller alemana, Ángela Merkel, y los jefes de gobierno de los 16 estados federados tomaron esta decisión en una difícil reunión de más de 11 horas en la que se dio marcha atrás en la última relajación de las restricciones por la evolución negativa de la COVID-19.
En el encuentro se acordó asimismo prolongar todas las medidas contra la pandemia hasta el 18 de abril.
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