El gobernador del estado de Illinois (EE.UU.), JB Pritzker, firmó este viernes una nueva ley que permite a ciertos pacientes con enfermedades terminales poner fin a sus vidas con medicamentos recetados por un médico.
Conocida como ‘Ayuda Médica para Morir‘, la legislación puede ser aplicada a personas que reúnan ciertas condiciones, como un pronóstico de vida no mayor de seis meses, determinado por dos médicos; tener capacidad mental para tomar decisiones médicas; presentar varias solicitudes escritas y orales para recibir el medicamento respectivo y estar informado sobre todas las opciones de cuidados al final de la vida.
La legislación fue aprobada por el Senado de Illinois en octubre con un estrecho margen de 30 a 27 votos, después que la Cámara de Representantes la aprobara en mayo en una votación de 63 a 42. La controvertida ley entraría en vigor en septiembre de 2026, dando tiempo a los proveedores de salud y al Departamento de Salud Pública de Illinois para implementar «procesos y protecciones estrictas», según los funcionarios. De ese modo, Illinois se sumará a otros 11 estados en los que el llamado suicidio asistido ya es legal.
Al promover la medida, Pritzker aseguró que está destinada a permitir a los pacientes «que enfrentan enfermedades terminales debilitantes tomar una decisión, en consulta con un médico, que los ayude a evitar dolor y sufrimiento innecesarios al final de sus vidas«. «Esta ley se implementará con cuidado, para que los médicos puedan asesorar a los pacientes sobre la toma de decisiones profundamente personales con autoridad, autonomía y empatía», sostuvo.
«Un día oscuro y doloroso para Illinois»
Sin embargo, la legislación suscitó una fuerte polémica, acumulando a su alrededor opiniones que alertan que permitir que personas con enfermedades terminales pongan fin a sus vidas podría conducir a coerción, discriminación y abuso. «Este proyecto de ley va demasiado lejos, sin las protecciones que merecen las familias de Illinois», consideró la líder republicano de la Cámara de Representantes de Illinois, Tony McCombie.
«Los forenses, quienes serán responsables de determinar las causas de muerte, nunca fueron incluidos en la conversación», añadió McCombie. «Las partes interesadas plantearon señales de alerta que fueron ignoradas. Esas lagunas plantean consecuencias reales y peligrosas», advirtió.
Sus preocupaciones fueron compartidas por la Sociedad Thomas More, una firma nacional de abogados sin fines de lucro, que tachó el día en el que la ley resultó firmada como «oscuro y doloroso para Illinois». «Cuando el estado señala que algunas vidas ya no valen la pena, los más vulnerables pagan el precio. En lugar de ofrecer verdadera compasión, apoyo y atención, esta ley ofrece una receta fatal. Eso no es misericordia. Es abandono«, manifestó Thomas Olp, vicepresidente ejecutivo de Thomas More Society.
«El estado obliga a los médicos a participar activamente y cooperar en el suicidio de un paciente, sin importar si su fe, ética o el Juramento Hipocrático lo prohíben. Esto es, simple y llanamente, una coerción inadmisible. Ningún médico debería ser obligado por el gobierno a participar directa o indirectamente en un proceso que ponga fin deliberadamente a una vida humana», concluyó.
Cuando estás atravesando enfermedades como la gripe, el resfriado, la sinusitis y la bronquitis, uno…
Aunque a veces quieras esconderlo, los ojos rojos y la cara hinchada son señales visibles…
La alergia al huevo se manifiesta cuando el sistema inmunitario interpreta que las proteínas de…
Los hijos de padres deprimidos tienen más probabilidades de desarrollar depresión ellos mismos, y un…
SANTO DOMINGO.- LaDirección General de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social…
Santo Domingo, 12 dic – Un total de 847 casos de malaria (paludismo) se han…