¿Por qué ocurren los falsos negativos y falsos positivos en la prueba de embarazo?
¿Has escuchado hablar sobre los falsos negativos y los falsos positivos en la prueba de embarazo? ¿Sabes a qué se refiere cada uno? Pues bien, el punto de partida es que los fallos en estos tests son posibles. Aunque en la actualidad tienen alta sensibilidad y especificidad, a veces no dan un resultado preciso.
Para entenderlo mejor, hay que recordar que estas pruebas detectan una hormona conocida como ‘gonadotropina coriónica humana (hCG)’. La misma se secreta a través de la placenta desde el inicio del embarazo; además, es posible detectarla tanto en la orina como en la sangre. Sus niveles aumentan a medida que avanza la gestación.
Sin embargo, existen algunas situaciones en las que la prueba es defectuosa o presenta errores en sus resultados. Así las cosas, es posible obtener un resultado positivo sin estar en realidad en embarazo (falso positivo), o bien, uno negativo a pesar de sí estar en embarazo (falso negativo). Te contamos más al respecto.
¿Qué es la gonadotropina coriónica humana?
Los fallos en la prueba de embarazo ocurren por lecturas erróneas en los niveles de la hormona gonadotropina coriónica humana. A menudo, se mide la subunidad ‘beta’ de esta hormona, por lo que la prueba de embarazo se denomina ‘beta-hCG’, por sus siglas en inglés.
Lo normal es que los niveles de esta hormona aumenten de manera progresiva conforme avanza la gestación, en especial en el primer trimestre. Estos se duplican cada 48 a 72 horas, y alcanzan un pico máximo alrededor de la semana 12 de gestación.
En sí, la hCG es una sustancia química producida en gran medida por las células sincitiotrofoblásticas de la placenta durante el embarazo. Su función es estimular el cuerpo lúteo para producir la progesterona necesaria para mantener el embarazo.
Puede detectarse tanto en la sangre como en la orina. No obstante, las pruebas de sangre se consideran más sensibles porque detectan niveles más bajos de la hormona y permiten hacer una medición cualitativa y cuantitativa.
- La medición cualitativa identifica si hay presencia o ausencia.
- La medición cuantitativa detecta niveles.
Entre tanto, las pruebas de embarazo de orina son caseras y requieren de niveles más altos de la hormona para su detección. Sumado a esto, dependen del modo de uso que le dé el usuario. Por tanto, si hay errores en su realización, también hay más probabilidades de que arroje fallos.
Es importante mencionar que la hormona se detecta entre los 14 y 17 días después de la concepción. Por eso, se recomienda esperar 15 días después de tener relaciones sexuales sin protección o al menos un día de retraso de la menstruación para obtener un resultado más preciso.
Los falsos negativos en la prueba de embarazo, uno de los fallos frecuentes
Los falsos negativos son los fallos en la prueba de embarazo más comunes. Pueden producirse por diferentes situaciones, como las siguientes:
- Fases muy tempranas de la gestación. Se recomienda esperar de uno a tres días después del retraso de la menstruación o al menos 15 días de la relación sexual sin protección anticonceptiva.
- Orina muy diluida. Esta puede derivar concentraciones de hormona gonadotropina coriónica humana muy bajas. Por eso, se recomienda utilizar la primera orina de la mañana.
- Uso incorrecto de la prueba de embarazo. Como el error en el lugar de colocación de la orina o de la exposición de tiempo. Es esencial seguir las indicaciones al pie de la letra.
Ahora, si el resultado es negativo, pero aún hay dudas o la menstruación no aparece, se debe repetir la prueba a los cinco o seis días (o por lo menos con dos días de diferencia) para corroborar el resultado.
En su defecto, también se puede realizar una prueba de embarazo en sangre o consultar con el médico (quien puede sugerir una ecografía transvaginal).
Los falsos positivos en la prueba de embarazo
Cuando la prueba de embarazo sale positiva, hay probabilidades superiores al 97 % de que sea cierto. Aun así, a veces hay fallos y pueden resultar falsos positivos. Por lo general, esto ocurre cuando hay situaciones en las que la hormona gonadotropina coriónica humana está elevada sin que haya embarazo. Por ejemplo:
- Algunos cánceres de células germinales (tumores secretores de gonadotropinas).
- Enfermedad trofoblástica (coriocarcinoma).
- Tratamiento hormonal para procesos de reproducción asistida (en ocasiones se usa la hormona gonadotropina coriónica humana como parte de la terapia).
- Consumo de algunos medicamentos, como algunos anticonvulsivos, diuréticos o ansiolíticos. Por tal razón, se debe leer el prospecto de los medicamentos e informar al médico sobre su consumo.
Asimismo, puede producirse en otros casos de embarazos no viables como los siguientes:
- Embarazo ectópico, que se produce fuera del útero y las posibilidades de desarrollo favorable son bajas.
- Embarazo anembrionario o anembriónico (sin embrión).
- Luego de un aborto espontáneo.
Tras un aborto, se produce disminución progresiva de la hormona gonadotropina coriónica humana. Por eso, pueden pasar semanas hasta que sea indetectable. De ahí que el test arroje resultados positivos en ausencia de embarazo.
Como sea, es necesario hacer un seguimiento, ya que si los niveles no descienden tras varios días, puede indicar que quedan restos embrionarios en la cavidad uterina. De ser así, el médico debe intervenir.
En última instancia, cuando la prueba de embarazo casera se lee fuera del tiempo aconsejado, puede arrojar falsos positivos. Lo mismo ocurre si la prueba está vencida.
Los fallos de las pruebas de embarazo se pueden evitar con un uso correcto
Lo más importante para evitar los fallos en la prueba de embarazo es utilizarla de forma adecuada y usar la más sensible posible. Por otro lado, no debe realizarse antes de la fecha indicada. Esto aplica especialmente en mujeres sometidas a tratamientos de reproducción asistida, ya que pueden arrojar falsos positivos.
Dicho esto, es esencial realizar la prueba cuando el médico lo indique. Además, conviene seguir paso a paso todas las indicaciones. La mayor parte de las veces, los fallos se dan por el uso de pruebas vencidas o por una mala realización.