¿Cansancio y mal humor? Puede ser una deficiencia de un nutriente
“Si tuviésemos una alimentación perfectamente equilibrada, no necesitaríamos tomar vitaminas adicionales, así que puede ser buena idea que consideres un complejo vitamínico”, me dijo mi doctora cuando notó que debía ajustar algunos valores. Mi abuela diría: “eso es que estás anémica, necesitas vitaminas” e inmediatamente prepararía un batido con betabel, zanahoria, berro y naranja. Y es que aunque no lo notemos, la deficiencia de un nutriente esencial, puede generarnos una cantidad de síntomas desagradables, como cansancio e irritabilidad, e incluso desmejorar considerablemente la salud.
La deficiencia de nutrientes ocurre en muchos lugares del mundo, de hecho un comunicado de la Secretaría de Salud, en México señala que, desde hace casi 20 años, los padecimientos más comunes en el país están relacionados con mala nutrición y destaca que “las estadísticas de morbilidad y mortalidad general en México señalan que cerca de 12 por ciento de la población, particularmente en el área rural, presenta insuficiencia nutricional, anemia, déficit proteico y desbalances de micronutrientes”.
Lo peor, es que no es difícil entrar en alguna de esas estadísticas, cuando estamos en desequilibrio por cualquier razón. La Clínica Mayo indica que, en general, la anemia por deficiencia de vitaminas es la falta de glóbulos rojos saludables lo cual se debe a tener cantidades inferiores a las normales de ácido fólico, necesario para todos, no solo para mujeres embarazadas; y de vitamina B-12.
Pero, ¿cómo saber que tienes una deficiencia de vitamina B12? Escuchando tu cuerpo. Poniendo atención a esa fatiga que no se debe a un día ajetreado, sino que es permanente; un mal humor inexplicable, palidez y una sensación de falta de aire.
El Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre destaca además que, si bien estos son síntomas que aparecen al principio, luego pueden aparecer otros mucho más severos como dolores de cabeza, mareos e incluso síntomas del sistema nervioso, porque la vitamina B12 es fundamental para el funcionamiento adecuado del cerebro.